lunes, 28 de marzo de 2011

Tampoco ingerir batracios de origen oficialista ...



 
            En la semana pasada causó honda preocupación, por un lado, y espanto, por el otro, la posibilidad de que el riojano innombrable – quien no es, precisamente, Facundo Quiroga -  pudiera sumarse a la campaña política de la Provincia de La Rioja a través de un pacto con el actual gobernador, Luis Beder Herrera, para obtener votos para su partido “Lealtad y Dignidad” (silencio respetuoso), a cambio de garantizarse la tercera banca en el Senado. A pesar del diferente tratamiento que efectúan los medios, según los intereses y posiciones que defiendan, es evidente que el actual gobernador riojano pretende sumar votos “como fuere” para “homenajear al ex – presidente Néstor Kirchner.” (http://tiempo.elargentino.com/notas/gobierno-rechazo-acuerdo-con-menem ). De todas maneras, y aún admitiendo que se trata de una jugada local no respaldada por el gobierno nacional y que puede haber caído como la ingesta de un batracio de regular tamaño, vivo y sucio, en sectores cercanos a la Casa de Gobierno, no es menos cierto que, a la hora de los budines, hay que asumir posiciones con la valentía que las propias convicciones reclaman.  Y de manera categórica. Si el innombrable, por méritos propios, es una trágica y pésima figura, lo es para todas las circunstancias y no puede ser aliado ni aún a título provisorio (tiempo) o local (espacio). Es el ejemplo de la política que algunos cuantos no queremos que vuelva, es un ejemplo contra el cual este gobierno se dedicó a enarbolar sus banderas de luchas y reivindicaciones. Posiblemente - es mi opinión personal - el innombrable trate de asegurarse, con sus uñas, una banca en el Senado, a fin de zafar un tranco más en la previsible responsabilidad penal que le cabe por los desgraciados sucesos de Río Tercero y en el caso del contrabando de armas. Con mayor razón aún, sostengo que la distancia debe ser puesta de modo inequívoco. La ciudadanía, tal como bien lo apunta mucha gente sesuda, puede llegar a quedarse con la reprochable imagen de que en política continúa valiendo todo con tal de sumar poder. Y como en este valle de lágrimas no todo es lo mismo, es necesario que en democracia sea purgada de la política esa imagen y, además, sean descartados - esperemos, definitivamente -  los modelos de carne y hueso que forjan ese tipo de imágenes.

Ósculos y abrazos

1 comentario:

  1. Chilla "¡Asesino!" en la plaza del mercado, y cada uno girará sobre sus vecinos sus ojos ansiosos preguntando: "¿Eres tú ése?" A Caín perseguimos hace algunos siglos por todo el mundo
    Así se engendra el miedo de nuestros propios delitos hasta hoy
    Saludos ...

    ResponderEliminar